Sitio pensado especialmente para compartir con las niñas y niños una lectura diferente cada día de la semana. No pretende sustituir la lectura individual. No busca ningún interés de tipo económico ni comercial.
Al lúgubre doblar del duro bronce, prestas resurgen almas de agua dulce, despiertan los guardianes del tesoro, quienes, en vida, actuaron con decoro.
Murieron en defensa de su honor, a manos fieras del cruel agresor, su tumba, lecho isleño, primoroso, cándido, fiel, purépecha, orgulloso.
Mis Príncipes, Mintzita e Itzihuapa, suban la cuesta, el llanto escapa, diríjance al panteón, hay luz de plata, ligados por su amor, sangre escarlata.
Musítense palabras cariñosas, platiquen de Janitzio, de mil cosas, oculten de miradas indiscretas la tierna oscuridad de sus siluetas.
Reciban las ofrendas de los vivos, por esa muerte de que son cautivos, coman charales, beban charanda, fumen tabaco, cumplan su manda.
Huelan incienso, huelan copal, hablen del bien, jamás del mal, son bienamados, son bienvenidos, muertos y vivos todos unidos.
Dialoguen con kurucha urápiti, de su eterno sueño, de su frenesí, regresen a sus fosas sumergidas y cúrenle, a su lago, . . . las heridas.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Isla de Janitzio, Michoacán, México, 02 de noviembre del 2011 Dedicado a Don José Luis Guzmán Soto Reg. INDAUTOR No. 03-2012-030612580800-14
Gonzálo, muchas gracias por compartir tu hermosa obra. El día de mañana con mucho orgullo, recitaré (esperando honrar con ello tu legado) para mi comunidad en la Ciudad de México, en torno a las festividades que conmemoran a nuestros fieles difuntos y a fin de dar a conocer la diversidad cultural en que nos encontramos, pues, acá hay mucha gente de Michoacán, que con nostalgia recuerda sus tierras y añora a ellas pronto. Saludos.
TUMBA ISLEÑA
ResponderEliminarAl lúgubre doblar del duro bronce,
prestas resurgen almas de agua dulce,
despiertan los guardianes del tesoro,
quienes, en vida, actuaron con decoro.
Murieron en defensa de su honor,
a manos fieras del cruel agresor,
su tumba, lecho isleño, primoroso,
cándido, fiel, purépecha, orgulloso.
Mis Príncipes, Mintzita e Itzihuapa,
suban la cuesta, el llanto escapa,
diríjance al panteón, hay luz de plata,
ligados por su amor, sangre escarlata.
Musítense palabras cariñosas,
platiquen de Janitzio, de mil cosas,
oculten de miradas indiscretas
la tierna oscuridad de sus siluetas.
Reciban las ofrendas de los vivos,
por esa muerte de que son cautivos,
coman charales, beban charanda,
fumen tabaco, cumplan su manda.
Huelan incienso, huelan copal,
hablen del bien, jamás del mal,
son bienamados, son bienvenidos,
muertos y vivos todos unidos.
Dialoguen con kurucha urápiti,
de su eterno sueño, de su frenesí,
regresen a sus fosas sumergidas
y cúrenle, a su lago, . . . las heridas.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Isla de Janitzio, Michoacán, México, 02 de noviembre del 2011
Dedicado a Don José Luis Guzmán Soto
Reg. INDAUTOR No. 03-2012-030612580800-14
Gonzálo, muchas gracias por compartir tu hermosa obra.
ResponderEliminarEl día de mañana con mucho orgullo, recitaré (esperando honrar con ello tu legado) para mi comunidad en la Ciudad de México, en torno a las festividades que conmemoran a nuestros fieles difuntos y a fin de dar a conocer la diversidad cultural en que nos encontramos, pues, acá hay mucha gente de Michoacán, que con nostalgia recuerda sus tierras y añora a ellas pronto.
Saludos.